Las golondrinas han abandonado sus nidos de barro revolotean por las calles del pueblo con sus quiebros y requiebros. Una de ellas se posa en el alfeizar de mi ventana sus alegres trinos son el preludio de un nuevo día. La contemplo tras la celosía de la persiana. Son los sonidos del campo que cosen la noche con el día… Leer más »
En el hortal entre el olivo niño y el nogal padre ya floridos, el viento trajo en su galeón de remos de cierzo la semilla de esta bella flor, que cose el epíteto violeta con la guja líquida de tinta de savia. José mariano seral
El sarmiento hijo de la vid derramó una lágrima de savia en su parpado nudoso en la poda. Lo planté en febrero en tierra fértil a repique metálico de azada, hoy luce una sonrisa coqueta en los labios de sus pámpanos que le dan vida. José mariano seral
La helada tardía escarchó los pétalos de las manzaneras verde doncella estas, como buenas damas debieron alertar a la Reineta para que retrasasen el viaje de su floración y esperase en sus aposentos el sol de primavera. José mariano seral
Flor de patatera humilde, bajo tierra paciente el fruto engendra. Pétalos blancos sobre el pódium del vallo su belleza se ve ensalzada como Cenicienta con zapatos de Cristal. José mariano seral
Romería a San Cosme 8 de mayo del 2022, tras dos años de pandemia, se retoma la romería a San Cosme, aunque con alguna restricción para evitar aglomeraciones, como es la procesión y la bendición del agua en la Fuente Santa. Algunos vecinos de Coscullano hemos subido andando, disfrutando de la belleza del paisaje que la naturaleza nos brinda, y… Leer más »
Platero levanta sus pupilas azabaches en un movimiento a cámara lenta, bajo el membrillero de ramitas nudosas que se visten de primavera, me parece ver un esbozo de su sonrisa en su hocico, mientras contempla como hiendo el filo acerado de la azada con delicadeza entre mata y mata de las patateras, el azadón da sabrosos bocados a la corteza… Leer más »
Recitan los labios escarlatas de los pétalos de las amapolas su poesía visual desde el anfiteatro del ribazo del trigal. Yace el verbo de la semilla que escribe versos sutiles año tras año en el poemario que abre la primavera. José mariano seral
Sábado 30 de abril del 2022, se retoma la romería a la ermita de San Pedro. Día primaveral, los sembrados con las lluvias de abril han reverdecido. Las espigas erguidas dibujan olas lentas. Las amapolas se orillan en el ribazo de los campos al paso del Santo y de los vecinos de Coscullano. Se respira fragancia a romero. Suenan de… Leer más »
Hoy ha emprendido el último viaje, el de equipaje ligero como decía Machado en sus versos, Don José María Aso, el que fue durante varias décadas el párroco de Coscullano, Sipán, Loscertales y La Almunia (entre otras ocupaciones). Una persona buena, humilde, sencilla, polifacética, siempre estuvo con la gente en los momentos de alegría y en los de dolor y… Leer más »
Podar las parras acodadas sobre el muro pétreo del huerto. Plantar el sarmiento de la vid del corazón más dulce en tierra fértil para que se multiplique su fruto, como lectura del buen libro que crece en las mentes de los lectores. José mariano seral
Caminar sobre la tierra mullida del olivar, que dejó el hielo con sus burbujas de iglú, como levadura en la hogaza recién horneada. Al mirar atrás las huellas del pasado en los anillos del tronco del olivo, que escriben el presente.
Crece en su casita de barro desgaja sus pensamientos en su cabecita cobijada bajo tierra. José mariano seral
Como sílabas de verbo conjugan el parpadeo de la primavera amarrado por hebras escarchadas de las pestañas tras el sueño invernal. José mariano seral
Entornan los pétalos la ventana de la flor ante la dama de labios escarchados. Al amanecer el Sol la corteja, tira piedrecitas irisadas a su balcón. José mariano seral
En el invierno marchito cosechan con algarabía la pupila los colores amarillos y naranjas de los pétalos escarchados en el ribazo del huerto. Como gondoleros de la Plaza de San Marcos embarcan tu sonrisa por los canalillos de tus mejillas. José mariano seral
Abrir el portón del poemario locuaz del huerto, nacen los ajos que sembré con la yema de mis dedos ya hace un mes, silabean alegres con sus labios de clorofila sobre el verso del surco, recitan poemas encuadernados por la umbría escarchada del lomo del muro, entre las hojas secas arremolinadas de los sarmientos el membrillero manuscribe en el ribazo… Leer más »
Sueños de niño envueltos en papel de regalo, los deditos de Tristán rasgan el envoltorio como si fuesen las palmas de Eduardo Manostijeras. Chispitas, la gatita, también se siente afortunada, juguetea con sus patitas con el gurruño de papel desmenuzado como si fuese una pelota de goma, mientras, Tristán estrena sus gafas de realidad virtual. Tristán que es agradecido, quiere… Leer más »
Balan las ovejas como un coro de sopranos en una ópera de Verdi al ver aproximarse a Daniel, su pastor, a través de la cancela acerada del redil. Ya estaban en preaviso, conocen el sonido ronco del motor de su Citroën C4, que llega con sobrealiento al ascender por el último repecho. Entre silbidos y sonidos guturales les abre el… Leer más »
Es todo un honor poder colaborar en la revista de la Asociación Cultural Guaraguas de Aguas, pueblo vecino al mío, en su 25 aniversario, con uno de mis poemas. Tanto que se habla de la España vaciada, me parece una preciosa iniciativa que da voz a sus gentes. Mis felicitaciones por sacar adelante esta publicación. Me he tomado la libertad… Leer más »
Las cepas de troncos ensortijados por la fragua del sol y el yunque de la luna. Las plantó mi padre cuando tan solo eran frágiles vástagos, con sus manos encallecidas por el arduo trabajo del campo que le tocó vivir. Las flores amarillas, llegaron como los nidos de barro de las golondrinas bajo los maderos de la techumbre del aprisco…. Leer más »
Mirar la niebla, es como leer un texto sin verbos, con el mismo adjetivo. Cambiar durante unas horas de lectura, cuando el sol entreabre el libro riman los versos en la orilla de esa mar de nubes bajas, al finalizar la pleamar los sembrados centellean, el clic de la cámara se afana como rastrillo de mariscador. El manzano todavía niño,… Leer más »
Tierras domesticadas a golpe de azada y de “estralela”, en manos encallecidas del labrador. Como en el juego de infancia: “un, dos, tes, chocolate inglés”, cuando te das la vuelta, han crecido tres chopos, dos zarzales y una aliaga con afiladas agujas amarillas. Uno de los manzanos hastiado de ser siempre el mismo frutal, curva todas sus ramas como una… Leer más »
Hoy la niebla levantó su muralla portátil de átomos líquidos, bajo al castillo de Montearagón. Sus arqueros disparaban flechas de vértice escarchado, que no lograban alcanzar los pueblecitos alzados sobre el pedestal del pie de la Sierra Guara, que los acerca un poquito más al sol. Los cajicos resplandecían, sus hojas caducas ya doradas, permanecían en las ramas sarmentosas, desafiaban… Leer más »
Amanece el campo con ese frágil envoltorio de finos cristalillos con sus caprichosas formas geométricas, que tejen la Luna blanca con seda escarchada bajo el candil de Casiopea. El Sol sonriente lo abre como si fuese un regalo en las manos de un niño, deja a la vista los sembrados irisados, como si los hubiese regado el hombre de hojalata… Leer más »